jueves, 19 de febrero de 2015

El mundo al revés: El calotipo en España.

La Universidad de Navarra inaugura su nuevo Museo diseñado por el arquitecto Rafael Moneo, con varias exposiciones: Abstracción y modernidad, con el arte de vanguardia de la colección de María Josefa Huarte, Escenas del Norte de África captadas por José Ortiz Echagüe, cuya colección fue el germen de la actual colección de fotografía del Museo, y por último, la que en mi caso ha sido el motivo principal de la visita: la exposición El mundo al revés: El calotipo en España


La exposición es un verdadero lujo para cualquier amante de la fotografía antigua, pues nos permite contemplar una selección de rarísimos calotipos (primeras fotografías realizadas en papel) realizados en España por fotógrafos extranjeros, ingleses y franceses principalmente, en los primeros años de la fotografía. Por establecer un paralelismo, los podríamos considerar como los "incunables" de la fotografía. En la exposición tenemos también el raro privilegio de ver algunos negativos en papel, con sus respectivas copias en positivo, y también el efecto que produce la retroiluminación en algunos facsímiles de negativos (por razones de seguridad y conservación, no se han retroiluminado los originales, que se exponen al lado). También, en varias vitrinas se exponen los primeros libros editados con fotografías originales, y diversos álbumes recuerdo de viajes por España, alguno de ellos de muy gran formato.  

Museo Universidad de Navarra, del arquitecto Rafael Moneo.

A continuación reproduzco el texto con la descripción de la exposición elaborado por el Museo:
"El Calotipo o Talbotipo fue inventado por William Henry Fox Talbot en Inglaterra en la década de los años treinta del siglo XIX. El procedimiento difería del primer invento fotográfico, el daguerrotipo, en que no partía de una imagen única y metálica, sino de un proceso donde el mundo quedaba reducido a una imagen sobre papel, invertida de izquierda a derecha y de arriba abajo, además de limitada a unos tonos en blanco y negro. Estas insólitas y maravillosas capturas de la realidad, pudieron ser multiplicadas gracias a que esta matriz negativa podía generar infinitas copias en positivo. Los calotipos que han sobrevivido son muy escasos, ya que además de su fragilidad, muy pocos fotógrafos lo abordaron debido a una férrea patente que realizó Fox Talbot en 1841. Los primeros fotógrafos calotipistas, principalmente ingleses y franceses, entraron en España a partir de 1849, atraídos por el sur de la literatura romántica y los libros de viajes, intentando descubrir lo diferente o lo exótico. La exposición reúne 160 imágenes, entre negativas y positivas, muchas de ellas de la propia colección del Museo Universidad de Navarra. Entre las piezas exhibidas estará Annals of the Artists of Spain, primer libro de la historia del arte con pruebas fotográficas sobre papel y editado en fecha tan temprana como 1847, además de ser el que contiene las primeras imágenes de temática española. Junto a él estarán las fotografías de Claudius Galen Wheelhouse, quien en 1849 desembarcó en Cádiz y Sevilla para realizar los primeros calotipos que se conocen en suelo español. Podremos contemplar también la obra de los principales artistas que recorrieron la península, muchas veces por caminos polvorientos, pertrechados por equipos fotográficos y químicos muy pesados cargados sobre mulas, intentando capturar por primera vez sobre un papel fotográfico un mundo que en gran parte les era desconocido . Entre ellos estarán Joseph Vigier, Edward King Tenison, Alphonse Delaunay, Francisco de Leygonier, Charles Clifford, Gustave de Beaucorps o Louis de Clercq.

Comisarios: Valentín Vallhonrat, Rafael Levenfeld, Carlos Sánchez y Javier Piñar"

Es de agradecer que el Museo no ponga inconveniente a los visitantes para hacer fotografías (sin flash, por supuesto). Muestro a continuación algunas imágenes obtenidas sin grandes pretensiones durante la visita (con mi teléfono móvil), para que los lectores que no puedan acercarse a Pamplona tengan una idea del espacio expositivo, aunque para disfrutar esta exposición, la visita es insustituible.





























Si bien el motivo principal de la visita fue esta exposición, también tiene gran interés la exposición Norte de África de José Ortiz Echagüe.










Y porqué no finalizar la visita con lo que para la mayor parte del público puede ser el motivo único de su visita al Museo: la exposición Abstracción y Modernidad, con una selección de obras de la colección de arte de vanguardia donada al Museo por Maria Josefa Huarte.













sábado, 7 de febrero de 2015

Cazando imágenes. Francisco Ontañón y Miguel Delibes

Paseando por Segovia, fue una agradable sorpresa encontrar esta exposición titulada Cazando Imágenes en el Palacio de Quintanar, que traigo a mi bitácora.

Cartel de la Exposición "Cazando imágenes".
El título de la exposición "Cazando imágenes" me hizo recordar que los coleccionistas de fotografía antigua también somos cazadores:  recorremos rastros, almonedas, librerías, anticuarios, y buscamos en Internet, cazando fotografías, cazando imágenes, y si Delibes decía que "Ontañón caza cazadores cazando", si tuviésemos la suerte de encontrar en nuestras cacerías alguna de estas fotografías de Ontañón (no es extraño encontrar las de otros contemporáneos suyos), ya tendríamos un buen trabalenguas, pues habríamos cazado las fotos en las que Ontañón cazó cazadores cazando.

Seguiremos pues atentos nuestra cacería, aunque las más de las veces volvamos a casa con el morral vacío. Hoy al menos, nos queda el consuelo de haber visto una bonita exposición, un paseo por la cual comparto con los lectores.

La presentación de la exposición nos explica perfectamente su contenido:

La Fundación Miguel Delibes, a través del Palacio Quintanar, presenta esta completa exposición fotográfica que consta de una selección de 39 fotos de las 120 que ilustraron en 1964 El libro de la caza menor de Miguel Delibes. Las fotos fueron tomadas por Francisco Ontañón, que acompañó al escritor durante tres años en sus habituales salidas destinadas a disfrutar de una de sus principales pasiones, la caza. 

La temática de la exposición no se reduce a la caza, Ontañón retrata sus temas favoritos: retratos de grupo, interiores, el mundo campesino... El telón de fondo lo compone una sociedad agraria en rápida transformación. Una España que Ontañón trató de reflejar de manera natural y sin artificios.

Como escribiera el propio Delibes: "Ontañón caza cazadores cazando, esa es su misión en este caso".