domingo, 27 de diciembre de 2015

La fotografía antes del Photoshop: Cortar y pegar, versión 1.0.


Quizás muchos os habéis preguntado en alguna ocasión como se arreglaban en tiempos de vuestros abuelos sin el Photoshop, pues bien, por si alguien tenía alguna duda aquí os muestro un ejemplo de lo que se podía hacer con unas tijeras, pegamento y buen pulso. 

Personal de servicio de una casa de la alta burguesía vasca. Foto Germán, Durango, circa 1920.

Sello en seco estampado en el cartón de la fotografía anterior


Esta fotografía se puede datar hacia 1915-25. Hay un sello en seco que indica "Foto Germán - Durango", y en ella posa para el fotógrafo el personal de servicio de una mansión de la alta burguesía  del País Vasco: mayordomo, chófer, lacayos, ama de llaves, doncellas, sirvientas, cocineras, niñeras, jardineros. Casi se puede identificar a cada uno por su ropa y su aspecto. Cuando el fotógrafo sacó la foto, es evidente que dos doncellas no pudieron posar, pero todo tiene arreglo, y a falta de técnica digital (faltaban algunos años) recurrieron a un remedio analógico... resolviendo el asunto de forma aceptable.
Tengo que reconocer que cuando la foto pasó por mis manos la primera vez, sólo le di un vistazo superficial y estuve a punto de no darme cuenta del retoque. Cuando reparé en ello me cautivó la inocencia del remedio, y la guardé en mi colección como curiosidad.  Todavía me cabe la duda de si esta labor fue obra del fotógrafo o de algun@ de los retratad@s...
Haciendo una búsqueda en Google, he podido ver que "Foto Germán" estuvo activo desde 1913 a 1963, y que en 2003 el Museo de Arte e Historia de Durango le dedicó una exposición y un catálogo.

Ampliación de detalle

Un remedio inocente, en el día (mañana) de los Santos Inocentes. Feliz día.
 

lunes, 7 de diciembre de 2015

Identificando fotografías: una boda aristocrática en Comillas, escenas de pesca y varios.

Sigo con mi arraigada costumbre de solicitar la colaboración de los lectores para identificar algunas imágenes de fotografías sin identificar que van entrando en mi colección, y aquí presento una nueva entrega de mis acertijos.

En primer lugar una fotografía sobre cartón del fotógrafo Gregorio García, que trabajó en Comillas desde finales del siglo XIX. Se trata de una boda, y sin lugar a dudas de la aristocracia que a principios del siglo XX construyó hermosas residencias de veraneo en dicha localidad. Quizás algún lector reconozca a alguno de los asistentes y podamos averiguar la identidad de los novios. Recuerdo a los lectores que para ver con mejor detalle la foto pueden hacer un click sobre ella para agrandarla.


Fotógrafo Gregorio García. Comillas

En segundo lugar una fotografía de una escena de pesca que llega desde Suiza, con la anotación al dorso "pescadores de sardinas de Santander".  Pero ¿de qué puerto se trata?


Siguiendo con el mismo tema, la pesca, estos dos rostros de pescadores, que recuerdan algunas imágenes de Ortiz Echagüe. ¿Alguien podría aventurar un posible autor?


En el reverso de estas dos fotografías de marineros figura una firma que no he podido identificar, quizás alguien pueda hacerlo.



Por último un claustro renacentista, que aunque la foto la encontré aquí, no creo que se trate de Cantabria.


Claustro renacentista a identificar. Fotopostal circa 1910.
Con los temas que hoy elegí para identificar, palacios, pescadores y claustro, creo que podría terminar con los versos de Zorrilla:


Yo a las cabañas bajé,
yo a los palacios subí,
yo los claustros escalé
y en todas partes dejé
memoria amarga de mí.

Como propina, una tarjeta postal de edición privada con una caricatura realizada por el dibujante, escultor y caricaturista santanderino Francisco González Gómez , ¿quién es el caricaturizado? incluyo también imagen del reverso que quizás pueda arrojar luz. Está dirigida a Vicente Corro, y  fechada el 24/01/950.

Identificada. José Ramón Saiz me informa que tiene la caricatura original, y que se trata del periodista deportivo y escritor Fermín Sánchez González (1891-1971) utilizó el seudónimo de "Pepe Montaña", también fue miembro de la Junta Directiva fundacional de la Federación Cántabra de Fútbol, y el primer árbitro de fútbol que hubo en Cantabria. 

Caricatura editada en tarjeta postal privada. 1949

Reverso escrito de la tarjeta postal.
  
Como siempre, muchas gracias.



lunes, 2 de noviembre de 2015

Retablo fotográfico de cántabros ilustres: Francisco Jaureguízar y Cagigal (4)

El 3 de noviembre de 1893, el vapor Cabo Machichaco de la Compañía Ybarra, atracado en el muelle número 2 de Maliaño, a la altura de lo que hoy es la calle de Calderón de la Barca, comenzó a arder. A bordo llevaba diversa mercancía, varias garrafas de ácido sulfúrico, y 51 toneladas de dinamita procedente de Galdácano que no había declarado.
El Vapor Correo Alfonso XIII había llegado a puerto el día anterior procedente de Cuba, y su capitán Francisco Jaureguizar y Cagigal, y el capitán subinspector  Francisco Cimiano ordenaron que el vapor Auxiliar nº 5, propiedad de la Compañía Trasatlántica Española, ayudase a extinguir el incendio. De esta forma, embarcaron ambos en el Cabo Machichaco, junto con 30 tripulantes del vapor Alfonso XIII. Todo ellos perecieron en la explosión que se produjo a las 5 de la tarde, segando la vida de 590 personas y causando una devastación enorme en el frente marítimo de la ciudad.
El Capitán Don Francisco de Jaureguizar y Cagigal. Detalle. Circa 1891.
Hoy dedico esta sección habitual del blog, a Francisco Jaureguizar y Cagigal, con esta fotografía, tamaño Gabinete, que como puede observarse llegó a mí en lamentable estado. Buscando en Google he podido encontrar una imagen obtenida del mismo retrato, y publicada en la Revista de Navegación y Comercio, y viendo que también lo han recortado a tamaño busto, podría haber sido obtenida de esta misma fotografía.
El Capitán del Alfonso XIII, Don Francisco de Jaureguizar y Cagigal. Circa 1891.
Jaureguizar luce en la foto, entre otras, dos cruces blancas del mérito naval, y ganó una tercera que le fue concedida por haber realizado en julio de 1892 el viaje más rápido entre la isla de Cuba y el puerto de Santander, en 10 días y 16 horas. Por tanto este retrato fue realizado antes de esa fecha.
D. Francisco de Jaureguizar y Cagigal. De la Revista de Navegación y Comercio.
Obtenida en la web Vidamaritima.com
Este era su barco, el moderno vapor Alfonso XIII, de la Compañía Trasatlántica, construido en 1888 en los prestigiosos astilleros Denny Brothers de Dumbarton. "Su silueta era excepcionalmente esbelta, con casco de acero rematado en graciosa proa de violín, con botalón" (González Echegaray).
Vapor Alfonso XIII. Tarjeta postal editada por M.N., circa 1910.
En la imagen que sigue el vapor Cabo Machichaco, ya ardiendo, momentos antes de la explosión, en la famosa y archireproducida fotografía de Pablo Isidro Duomarco.

Fotografía en formato tarjeta postal. El "Cabo Machichaco" ardiendo. Foto Duomarco. 

Y este es el monumento que la ciudad de Santander erigió en recuerdo de los fallecidos en la catástrofe, obra del arquitecto municipal Valentín Lavin Casalis, ubicado frente a la Estación Marítima, a 100 metros del lugar de la explosión.

Monumento del Machichaco. Tarjeta postal editada por Hauser y Menet en 1904.
Toda la prensa mundial se hizo eco de la tragedia, y en algunas publicaciones ilustradas se publicaron grabados con composiciones, en algunos casos como este, bastante truculentas, como es el caso de la que publicó la revista francesa Le Petit Journal, en la que podemos ver las labores de rescate realizadas por buzos rodeados de cadáveres...

Ilustración de época publicada en la Revista francesa Le Petit Journal de 25/11/1893.

 Esta es la cuarta entrega de la serie "Retablo fotográfico de montañeses ilustres", quien quiera ver las anteriores puede consultar los siguientes post:
- Retablo fotográfico de cántabros ilustres (1): Pereda, Concha Espina y Fernando de los Ríos
- Retablo fotográfico de cántabros ilustres (2): Galdós y Estañi 
- Retablo fotográfico de cántabros ilustres (3): Luis Quintanilla y Julio Maruri 

domingo, 18 de octubre de 2015

El Guardián de la Revolución. La fotografía como elemento auxiliar de la historia.

El próximo viernes 23 de octubre, se presenta en el Ateneo de Santander el libro de José Manuel Puente Fernández, El guardián de la revolución. Historia del Partido Comunista en Cantabria (1921-1937), de la editorial Librucos que dirige con entusiasmo Ramón Villegas.


Carnet que acreditaba a Roberto Álvarez Eguren como Presidente del Tribunal Popular de Santander, que también incluía un pase para los tranvías de Santander. 14 de septiembre de 1936.

Cubierta del carnet anterior, realizado en piel con escudo y letras estampados en dorado
A la hora de buscar imágenes para ilustrar ciertos temas, suelen topar autores y editores con la dificultad para acceder a imágenes inéditas, porque la mayor parte del abundante material que se hizo fue en gran medida destruido o escondido por sus propietarios por razones obvias de seguridad personal. Las tropas de Franco entraron en Santander el 24 de agosto de 1937, y el material de archivo de los fotógrafos y periódicos fue incautado por el aparato de seguridad que acompañaba a las tropas ocupantes, utilizando dichas fotografías para "depurar responsabilidades" y realizar la posterior represión. Por ello son muy escasas las fotografías que se conservan realizadas durante la guerra civil, en los trece meses de gobierno republicano. En el prólogo del libro, cuenta José Ramón Saiz Viadero que, "el temor era tal que, como me comentaba discretamente Miguel Guerra Pérez-Carral en los albores de la transición democrática iniciada en el post-franquismo, que durante la última noche republicana santanderina, él mismo se encargó de quemar toda la documentación existente en la sede del Partido Comunista, a la sazón establecida en el número 1 de la calle Pedrueca, en el mismo edificio de lo que ahora es la Fundación Marcelino Botín".
A Roberto Álvarez Eguren, propietario de este carnet que tengo en mi colección, y que se publica en el libro,  su militancia política y los puestos que ocupó durante la guerra civil le costaron la vida. Abogado, sobrino del líder del Partido Reformista Melquiades Álvarez, quién a su vez fue asesinado en la Cárcel Modelo de Madrid en agosto de 1936, representó a las agrupaciones socialistas de Santander y Camargo en el Congreso Extraordinario del PSOE de 1921, y firmó el manifiesto tercerista, base del PCOE, según nos indica José Manuel Puente. Ayudó a constituir el Partido Comunista en Cantabria, aunque regresó a las filas socialistas a finales de los años 20. Durante la guerra civil fue consejero municipal, presidente de la Comisión de Justicia del Frente Popular, presidente de la Audiencia Provincial de Santander y fiscal jurídico militar del Cuerpo de Ejército de Santander. Tuvo la oportunidad de marchar de Santander como hicieron otras figuras destacadas del Frente Popular pero no lo hizo y permaneció en Cantabria sabedor del destino que le esperaba. Evitó desmanes de última hora al presentarse en la cárcel provincial para garantizar la vida de los presos hasta la llegada del ejército franquista. Igualmente, decretó la libertad de las mujeres que así lo desearan poniéndolas una escolta personal. Tras la entrada de los nacionales en la capital de Cantabria, fue detenido e ingresó en la Prisión Provincial de Santander el 3 de septiembre de 1937 conducido por guardias de Asalto, siendo ejecutado en el cementerio de Ciriego el 7 de septiembre a las 6:45 junto al alcalde de Arenas de Iguña, Lorenzo Ríos y Ríos.
Mario García-Oliva, en su libro La Abogacía en Cantabria, notas para la historia del Ilustre Colegio de Abogados, indica que el 7 de septiembre, se reunió una Junta General Extraordinaria del Colegio, en la que el Decano dio cuenta de que se le había interesado por varias personas que apoyase la petición de indulto del abogado D. Roberto Álvarez Eguren, condenado a la última pena. Por desgracia, después de convocada esta Junta, había llegado a conocimiento del Decanato que se había cumplido ya la sentencia.
En este caso, no se trata tan sólo una fotografía (un retrato),  sino que va integrada en un documento que incorpora mucha más información: cartera de piel con iconografía de escudo republicano, sello del Frente Popular de Izquierdas, pase de tranvías, etc., formando un "objeto fotográfico" de valor histórico y evidente rareza. Pensemos que carnets de Partidos Políticos y Sindicatos, hubo muchos en esos años, pero Presidente del Tribunal Popular de Santander, sólo hubo uno.
En algún momento trataré en este blog un tema, quizás menor, pero que puede tener su interés, como es la fotografía aplicada a su uso como medio de identificación documental de personas (carnets, pasaportes, documentos varios, etc.).

Es de destacar en este libro, además de la gran labor de documentación realizada por el autor, el esfuerzo realizado para incorporar al texto una gran cantidad de información gráfica en gran parte inédita: fotografías, carteles, propaganda, impresos...,  que lo hacen visualmente atractivo para el lector. La fotografía se revela así como uno de los más importantes elementos auxiliares de la Historia moderna.

También inédita es la fotografía que se muestra a continuación, y que se publica en el libro, obtenida posiblemente por algún corresponsal gráfico que acompañaba a la tropas de Franco, en ella se ven el estadio del Racing (los Campos de Sport del Sardinero) convertido en improvisado campo de concentración. Con la caída de Santander, fue tan elevado el número de soldados republicanos hechos prisioneros, que se habilitaron distintos recintos como campos de prisioneros y prisiones provisionales: El Palacio de la Magdalena, Los Campos de Sport del Sardinero, la Plaza de toros, el Seminario de Corbán, etc.   El fotógrafo ha buscado en este caso un punto elevado desde el que hacer la foto por encima de la valla, y así podemos ver gran cantidad de presos.

Prisioneros internados en los Campos de Sport del Sardinero. Fotografía de autor anónimo. Agosto/Septiembre de 1937 

Del mismo autor y reportaje es la siguiente fotografía,  en la que aparece el mismo coche Citröen matrícula EX 124 o 174 ?, posiblemente el del fotógrafo (¿alguien me podría facilitar algún dato sobre la matrícula?). Esta segunda foto quizás fue obtenida unas horas antes que la de los Campos de Sport, al pasar por la carretera nacional que atravesaba el pueblo de Las Caldas de Besaya, y se pueden ver los daños sufridos por el hotel del balneario durante en avance sobre Santander de las tropas de Franco, en el mes de agosto.


Gran Hotel y Balneario de Las Caldas de Besaya. Destrucciones realizadas durante el avance sobre Santander en agosto de 1937. Fotografía de autor anónimo.


Pero volviendo al principio, el próximo viernes en el Ateneo de Santander, presentación del libro.

 

jueves, 17 de septiembre de 2015

Viaje fotográfico por España, exposición en el CDIS de Santander

Resulta un verdadero lujo para los amantes de la fotografía antigua, visitar la exposición que se ha inaugurado hace una semana en el Centro de Documentación de la Imagen de Santander (CDIS), en la Sala "Ángel de la Hoz" con los fondos de una colección privada santanderina. Y lo es, además de por la calidad del material expuesto (original, por supuesto), porque muchas de estas fotografías se exponen por vez primera en España.

 
 
 
Tarjetón anunciador de la exposición

Algunas de ellas, magníficas y en gran formato, son conocidas porque corresponden a imágenes ya catalogadas y publicadas de los grandes fotógrafos extranjeros que trabajaron en España en el siglo XIX, como es el caso del inglés Charles Clifford (1818?-1863), y del francés Jean Laurent (1816-1886).

 
 

Haciendo doble click en las imágenes se ven a mayor tamaño. Lamento los reflejos que se ven en los cristales, pero mis limitaciones como fotógrafo son evidentes, y el efecto de la luz en los cristales no lo pude eliminar.
 

Otras, habían sido publicadas ya en diversos libros sobre historia de la fotografía, o de Cantabria, como es el caso de la fotografía del arco efímero erigido por la compañía del ferrocarril de Isabel II en honor a la reina, de autor anónimo.



 De Pica-Groom, nombre artístico de Eduardo López de Ceballos, ya conocíamos buena parte de su obra a través de la reciente exposición en la Obra Social de CajaCantabria, pero aquí se aporta un lujoso álbum con numerosas fotografías encuadernadas de la colección "España Fotográfica. Provincia de Santander", que se presenta en una vitrina abierto por la imagen que reproduce la entrada a "Villa Florida", el palacete situado en la calle Magallanes donde actualmente se ubica el CDIS, y en uno de cuyos anexos se encuentra la sala de exposiciones "Ángel de la Hoz".



Villa Florida, hoy.
 
Pero, bajo mi punto de vista, si algo merece la pena destacarse entre todo lo expuesto, por su rareza, es el conjunto de siete fotografías realizadas por el Conde de Lipa, Luis Tarszenski (1783?-1871), fotógrafo de origen polaco, que trabajó en Sevilla, Málaga y Zafra. Fue fotógrafo de Isabel II, recogiendo con su cámara el acto de colocación de la primera piedra del edificio de la Biblioteca Nacional, fotografía que en estos momentos está expuesta en la exposición temporal Mirar la arquitectura. Fotografía monumental en el siglo XIX, en la Biblioteca Nacional.
Las fotografías expuestas del conde de Lipa son, una de la colocación de la primera piedra del Ayuntamiento de Badajoz en 1867, una panorámica de Granada y cinco de Elche. De la primera existen referencias en la red, aunque no me consta que haya sido expuesta nunca, las otras son piezas inéditas.

 

 
 
 
 
Nada, me rindo... imposible encontrar un ángulo para hacer las fotos, hay que hacer un verdadero esfuerzo para imaginárselas, así que tengo que recomendar encarecidamente que quien esto lea visite la exposición. Impresiona tener a escasos centímetros de los ojos, estas joyas de los primeros tiempos de la fotografía.
 
 
 
 
 

Así que aprovechen esta ocasión única, pues hasta el 18 de octubre podrán disfrutar viendo estas imágenes que nos transportan a la España que pudieron contemplar los viajeros románticos, aquellos "curiosos impertinentes" que se acercaron a conocer un país exótico, desafiando las incomodidades que suponía transitar aquellos polvorientos caminos...

 

jueves, 10 de septiembre de 2015

PhotoEspaña 2015: de turismo fotográfico por Madrid

Aunque en este blog me centro principalmente en la fotografía antigua de Cantabria, como coleccionista y amante de la fotografía no me puede pasar desapercibido el festival PhotoEspaña, que todos los veranos llena las salas de exposiciones madrileñas (y algunas en la periferia) de interesantes exposiciones dedicadas tanto a fotografía histórica, como a fotografía contemporánea.
Es tal la profusión de eventos que resulta casi imposible verlos todos, por lo que cada uno puede hacer su particular selección en función de sus gustos personales.
Este año he aprovechado para ver unas cuantas de estas exposiciones, entre las que destacaría en orden de mayor a menor interés que han despertado en mí, las siguientes:
 
Imprescindible para un coleccionista de fotografía antigua.
 
 
 
 
 
 
 
Una gran exposición. Una pena que no dejasen hacer fotos... No obstante en la página del enlace que ofrezco, aparecen bastantes... 
 
Pequeña exposición de una gran fotógrafa, en una agradable sala de exposiciones. Resulta chocante el contraste entre la idea de lujo que transmite la marca Loewe, y el ideario político de izquierda revolucionaria de esta artista. A destacar también el catálogo gratuito exquisitamente editado: Un 10 para la Fundación Loewe!!!!
 
 
 
  

 
- Chema Madoz 2008-2014. Las reglas del juego. Sala Alcalá 31, Comunidad de Madrid
Cada vez que veo sus fotografías, me asombro del trabajo previo que tiene que haber detrás de cada una de ellas.
 

 
 
- Lola Álvarez Bravo, Círculo de Bellas Artes
 




- Los mejores libros de fotografía del año, Biblioteca Nacional.
Resulta asombroso que todo lo expuesto se produzca en un año... hay algunos libros que son verdaderas obras de arte en sí mismos, además de las fotografías que presentan.
Estos son los premiados (pulsar enlace).
 
 
 
 
 
Y por supuesto también, la magnífica exposición de Paul Strand en la Fundación Mapfre.

Pero había mucho más...

... y mucho calor, que era agosto.