Es una gran satisfacción colaborar nuevamente con el Centro de Documentación de la Imagen de
Santander, del Ayuntamiento de Santander (CDIS), con una nueva exposición de
fondos de mi colección fotográfica, después de las anteriores Rostros de la Historia (2014), Dióscoro Puebla, la fotografía y la
formación de un artista (2016), y En
Éxtasis, fotografías de las apariciones de Ezquioga (2018).
 |
Expiación, José Buchs, 1920
|
En esta ocasión presentamos la exposición El cine mudo de José Buchs. Santander, 1920 en la que se ofrece al
público un conjunto de fotografías que constituyen una primicia, encierran
varias incógnitas y desvelan algunos datos hasta ahora desconocidos. Se trata
de 28 copias de revelado químico viradas, de 12x16 cm. Rendimos además homenaje
a su autor, ya que el año próximo se cumplirán cincuenta años de su
fallecimiento y el de su hijo, el también director de cine Julio Buchs (Madrid,
1926, ibídem, 1973).
 |
Expiación, José Buchs, 1920
|
Sabíamos a través del Diccionario cinematográfico, del historiador y
escritor José Ramón Saiz Viadero, que el director de cine santanderino José
Buchs Echeandía había rodado en 1920, en
Santander, tres películas: Expiación,
¡Cuidado con los ladrones!, y La
venganza del marino, que están entre las primeras películas comerciales
rodadas en Cantabria, en localizaciones fácilmente reconocibles en algunos
casos: playa de El Sardinero, sala de juego y terraza del Gran Casino, casa de
Adolfo Pardo (hoy de Botín), etc. y en otros lugares a identificar. Todas las
películas de esta trilogía santanderina están perdidas, como sucede con la
mayor parte del patrimonio cinematográfico de los tiempos del cine mudo, aunque
a veces la casualidad nos depara alguna grata sorpresa, como en este caso.
Gracias al feliz hallazgo de estas fotografías, y de una hoja con los
argumentos en inglés de las dos primeras (traducidas para este catálogo por Ana
Istance), podemos reconstruir parte de lo que pudieron ser. Al aparecer juntas
las fotos y la hoja con los argumentos, podemos suponer que formaban parte de
un intento de distribuir estas películas en el mercado anglosajón,
rentabilizando la inversión.
 |
Expiación, José Buchs, 1920
|
Entre las incógnitas a las que antes me refería está el tema de la
autoría de las fotografías, pues en ninguna de ellas se hace referencia al
autor. Se sabe que los responsables de fotografía de ¡Cuidado con los ladrones! fueron Enrique Blanco y Alberto Arroyo,
por lo que son los más probables candidatos para la atribución de este trabajo
de foto fija. La denominación de foto
fija puede tener un triple significado, así podemos utilizar el término
para designar tanto al encargado de fotografiar el rodaje, a su profesión, y a las
imágenes que obtiene. Estas fotografías constituían un elemento indispensable
para la promoción de cualquier película en prensa, cartelería, programas de
mano, tarjetas postales, colecciones de cromos, etc. Eran imágenes muy cuidadas
con un especial tratamiento del encuadre, la luz y la composición.
 |
¡Cuidado con los ladrones!, José Buchs, 1920
|
El trabajo de foto fija, en
palabras de Miquel Àngel Pintanel, documentalista de la Filmoteca de Cataluña, “era
hasta los años cincuenta como una película paralela”. Hay una anécdota que cuenta el director de cine Robert Bresson
sobre esto: La película que estaba haciendo no iba muy bien, y le preguntó al
foto fija: “¿Cómo está yendo tu película?” Estas fotografías no se hacían
durante el rodaje, sino en los descansos, conformando un resumen paralelo.
Durante el proceso de documentación de estas imágenes, hemos podido
saber que la Filmoteca de Cataluña conserva entre sus fondos un conjunto de 118
fotografías de foto fija
correspondientes a 15 películas dirigidas por José Buchs entre 1922 y 1930. Además,
custodia 5 fotos de la construcción de los estudios de Film Española, en Madrid, de la cual era gerente Oscar Hornemann, y
José Buchs director artístico. Las imágenes que aquí mostramos,
correspondientes a 1920, son por tanto anteriores a todas ellas.
 |
¡Cuidado con los ladrones!, José Buchs, 1920
|
Sólo una de las fotografías de esta exposición tiene anotado al dorso el
título de la película a la que corresponde –Expiación-.
En el resto, podemos deducirlo gracias a los argumentos que se incluyen
traducidos en este catálogo. Algunas de las fotografías, no obstante, resulta
difícil determinar a qué película pertenecen, por lo que no podemos descartar
que alguna forme parte de la tercera película rodada en Santander –La venganza del marino- de la cual no
hemos encontrado el argumento.
También merece la pena señalar la colaboración obtenida por Buchs entre
algunos miembros de la alta burguesía santanderina, que abrieron sus mansiones
para el rodaje de varias escenas de estas películas, como es el caso de El Promontorio, residencia de D. Adolfo
Pardo, que acababa de ser construida en 1915 por el arquitecto Javier González
de Riancho, autor del contiguo Hotel Real y del Palacio de la Magdalena. La
curiosidad de la clase alta santanderina ante el cine, como la de los
adinerados industriales Eduardo Hoppe y Ángel Jado, también favoreció el rodaje
de varias películas amateur en esos años.
 |
¡Cuidado con los ladrones!, José Buchs, 1920
|
Quiero finalizar esta introducción reivindicando el papel de los
coleccionistas, que buscamos con afán e ilusión en todo tipo de rastros y
almonedas intentando rescatar un patrimonio olvidado y en riesgo de
desaparición, y también reconociendo la labor de instituciones como el CDIS,
que además de conservar en su archivo una buena parte del acervo fotográfico de
esta ciudad, realiza a través de la Sala de Exposiciones Ángel de la Hoz, una
labor constante de difusión de este patrimonio. Mi agradecimiento a todo su
equipo, pues gracias a su labor y profesionalidad disfrutamos cada año en
Santander de un programa de exposiciones que nos acercan a la fotografía histórica
y a los fotógrafos.
En el siguiente enlace de Youtube se hace una breve presentación de la exposición.
https://www.youtube.com/watch?v=lzkwo9Q-_Xk&t=23s